lunes, 12 de mayo de 2008

¿QUÉ ES EL CÁNCER?

Es una enfermedad celular, que se caracteriza por la reproducción alocada de las células en alguna parte del cuerpo y como consecuencia se forman tumores malignos o neoplasias. Las células cancerosas invaden los tejidos y se desplazan por el organismo.

domingo, 11 de mayo de 2008

¿QUÉ FACTORES LO PRODUCEN?

Algunos afirman, que el cáncer se debe a la transformación de células normales en cancerosas, por factores ambientales, químicos, genéticos, emocionales y/o nutricionales. No todas las personas desarrollan cáncer por las mismas causas, sin embargo, los factores que se mencionan a continuación aumentan la vulnerabilidad de la persona a padecerlo.


Factores químicos: Los aditivos alimenticios como colorantes, preservantes, conservantes, etc., cigarrillos y bebidas alcohólicas destiladas como el whisky, el vodka y la ginebra.



Factores genéticos: Como la mutación de los genes supresores tumorales que son los encargados de producir la apóptosis para la eliminación de células de desecho y controlar la reproducción de las células. Así como, la herencia de oncogenes.



Factores emocionales: Como la presencia de conflictos internos generados por emociones negativas como el odio, el rencor, los celos, la envidia, la ira y el dolor extremo (por perdida de un ser amado).




Factores nutricionales: La mala nutrición ejerce una gran influencia en esta enfermedad. Dietas basadas en alimentos de alto contenido de aditivos químicos, bajas en fibra, con gran contenido de grasas hidrogenadas y trans, así como altos niveles de azúcar y nitratos.

sábado, 10 de mayo de 2008

¿CÓMO PREVENIR LA APARICIÓN DEL CÁNCER?

Conociendo los factores que producen la enfermedad, éstos pueden evitarse en la medida de lo posible. Además, es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:



Hacer ejercicio físico, incrementa la oxigenación de las células y las protege.


Tener una dieta rica en fibra y beber al menos un litro de agua diario, mejora la digestión y la eliminación de toxinas.




Consumir vegetales crudos (sobre todo los de color verde y rojo) al menos en el almuerzo y la cena, pues estos contienen gran cantidad de antioxidantes.





Evitar el consumo de carnes rojas. Las células de cáncer maduran en un medio ambiente ácido, una dieta basada en carnes es ácida, por tanto es mejor comer pescado o pollo, en lugar de carne vacuna o cerdo. La carne además tiene antibióticos, hormonas y parásitos, que son muy nocivos, especialmente para las personas con cáncer. La proteína de la carne es muy difícil de digerir y requiere muchas enzimas, cuando no se digiere queda en los intestinos y se petrifica, lo que conlleva a la creación de más toxinas.




Evitar o disminuir el consumo de azúcar, pues este es un alimento que le encanta a las células del cáncer. No consumiendo azúcar se corta uno de los insumos más importantes de las células cancerigenas.

Existen sustitutos del azúcar como la sacarina pero estos están hechos con Aspartame que también es muy nocivo. Mejores sustitutos del azúcar son la miel o el melado de panela.



Reemplazar la sal corriente, pues contiene un químico que se le agrega para que se vea blanca. Una mejor alternativa es la sal de mar o las sales vegetales.






Cambiar la leche de vaca por leche de soya, considerando que la leche de vaca produce mucus, especialmente en el conducto intestinal y las células cancerigenas se alimentan de mucus. Eliminando la leche, las células de cáncer no tienen que comer y por consiguiente mueren.




Hacer rutinaria una dieta variada, rica en nutrientes, con presencia de al menos un 20% de frutas y ácidos grasos esenciales como el Omega 3, Omega 6, Omega 9 (se encuentran en pescados como el atún).




Es importante consumir alimentos frescos sin aditivos y en la medida de lo posible orgánicos. Se recomienda el consumo de repollo, acelga, brócoli, tomate, pimentón, apio y coliflor; frutas ricas en vitamina C como la granadilla, el durazno y la guayaba; frutas ricas en fibra como la manzana, el mango, la piña y la naranja; los dátiles como las nueces, las almendras y las semillas de girasol; los cítricos como el limón, la naranja y la mandarina (la cáscara de la mandarina posee salvesterol Q40 que es un compuesto con propiedades anti carcinógenas); y, otros alimentos ricos en fibra, como el pan y el arroz integrales.




Evitar los recipientes de plástico para enfriar el agua o calentar los alimentos en microondas, pues este material al enfriarse o calentarse libera una toxina cancerígena denominada dioxina.

¿CÓMO TRATAR Y CURAR LA ENFERMEDAD?

El cáncer es una enfermedad de la mente, el cuerpo y el espíritu. Por tanto, se requieren cambios a estos tres niveles. Una actitud activa y positiva, le ayudará a la persona con cáncer a combatir y a convertirse en un sobreviviente; darse por vencido sólo acelerará el proceso invasivo de la enfermedad.


El ingrediente principal para la cura del cáncer es el cambio de actitud y de pensamiento, que conllevará un cambio en la rutina diaria. La enfermedad es sólo una señal de alerta de nuestro cuerpo, que nos avisa que algo no anda bien y que debe resolverse; si sólo nos encargamos de destruir el medio con que el organismo nos alerta, lo único que conseguiremos es que el síntoma regrese y quizás con más fuerza. Por esto, los métodos agresivos como la quimioterapia, más que efectividad han demostrado daños irreparables en el sistema inmunológico de los pacientes, por lo cual, inevitablemente se acelera su muerte a causa de infecciones y enfermedades menores. Métodos como la cirugía también han mostrado la invasión de las células cancerígenas a otros tejidos. De este modo, es claro que ni la quimioterapia ni la cirugía son la cura para la enfermedad.

Así es que, a la persona con cáncer no le queda más remedio que enfrentar sus conflictos, resolverlos y cambiar su vida, cambiar lo que come, lo que hace, lo que piensa y cómo asume la vida. Debe asumir una actitud valiente y decidir sí cambia o se rinde. Para esto, debe enfrentar la enfermedad como un aviso, no como un enemigo invencible. El cáncer tiene cura y no es una vacuna, los sobrevivientes tienen algo en común y es que decidieron vivir; por su familia, para cumplir sus sueños y para alcanzar sus metas. Decidieron cambiar su vida y ahora son una prueba fehaciente de que cambiar el modo de vivir, tener fé y esperanza, son la cura para ésta y muchas enfermedades.

Es extraño, pero las emociones negativas enferman a quien las siente. La rabia, la incomprensión, el no perdonar, el odio, la envidia, el deseo de venganza y no expresar los sentimientos, son la base de muchas enfermedades. Tanto, que algunos afirman que todas las enfermedades son psicosomáticas. Aprender a relajarse, a disfrutar de la vida, a perdonar, a expresar lo que sentimos, a tener un espíritu amable y amoroso, con una actitud positiva, será de mucho beneficio para nuestra salud y será fundamental, en la curación de la enfermedad.

viernes, 9 de mayo de 2008

¿CÓMO AYUDAR A LA PERSONA CON CÁNCER?


Apoyándolo, dándole aliento y motivándolo para continuar luchando y cambiando.

Si es necesario cambiemos nuestra rutina y alimentación, para que sienta menos dura su experiencia de cambio y nuestro apoyo.


Recomendándole ayuda psicológica, para tratar los conflictos y emociones, que pueden estar produciendo la enfermedad. Si es prudente podemos acompañarlo.

Recordándole sin ser agobiantes, qué cosas le hacen daño y cuáles le benefician.

Teniendo paciencia y procurando ser comprensivos con sus cambios de ánimo.

Mostrando fortaleza en el acompañamiento, pero dejándole claro lo importante que es en nuestra vida.

Favoreciendo ambientes cálidos y armónicos, libres de quejas, conflictos, reclamos y discordias.

Apoyándolo sin sobreatenderlo, pues tanta atención puede ser contraproducente y puede generar comportamientos dependientes y manipulativos, lo cual iría en contravía de la sanación.

La familia de la persona con cáncer también necesita apoyo y escucha, por tanto, deberían buscar ayuda psicológica y grupos de apoyo.